1. APARATO GENITAL MASCULINO.
1.1 Anatomía.
Testículos: Órganos pares que se alojan en las bolsas escrotales. Están envueltos por una membrana fibrosa llamada albugínea. Los septos dividen el testículo en lóbulos. Cada lóbulo contiene de uno a cuatro conductos seminíferos, formando una apretada red testicular de la que parten los conductos eferentes.
Vías espermáticas: Tubos rectos, red testicular, conductos eferentes, epidídimo, conducto deferente, vesículas seminales, conducto eyaculador.
Pene: Presenta una extremidad anterior llamada glande, abierta en el centro (meato urinario, parte final de la uretra por donde salen de forma indistinta pero no simultánea la orina y el esperma). El glande, los cuerpos cavernosos y el cuerpo esponjoso constituyen los cuerpos eréctiles del pene. El exterior del glande esta revestido por el prepucio.
Próstata.
Glándulas de Cowper.
1.2 Fisiología.
Las funciones reproductoras del hombre se concretan en la espermatogénesis (creación de espermatozoides) y la regulación hormonal masculina, ambas necesarias para la reproducción.
Conductos seminíferos: Poseen dos tipos de células: germinales o espermatogonias y de sostén o de Sertoli.
Espermatozoide: Tiene cabeza, cuello y cola. Tiene gran movilidad, que aumenta dentro del aparato reproductor femenino.
Semen: formado por espermatozoides y líquido seminal.
Tejido intersticial: Tejido conjuntivo muy vascularizado que se localiza entre los conductos seminíferos, donde se encuentran las células intersticiales de Leydig y que producen las hormonas sexuales masculinas.
Interrelación neuroendocrina: Para que se produzca la espermatogénesis, es necesaria la presencia de los andrógenos liberados por las células intersticiales.
1.3 Patologías.
Fimosis, criptorquidia, orquitis, hipertrofia de la próstata, tumores, esterilidad.
2. APARATO GENITAL FEMENINO.
2.1 Anatomía.
Ovarios: dos partes: Periférica (sustancia cortical con formaciones redondeadas o folículos de Graaf) y central (sustancia medular, con tejido conjuntivo y abundantes vasos y nervios).
Trompas uterinas o de Falopio: Tienen una estructura tubular.
Útero o matriz: Tres capas: túnica serosa o peritoneal, túnica muscular de fibra lisa o miometrio y capa mucosa interna o endometrio. Está fijado sobre el periné y unido por ligamentos a sus órganos vecinos.
Vagina: Desde el cuello del útero hasta la vulva. En mujeres jóvenes puede encontrarse el himen, membrana de forma y consistencia variable que puede romperse por movimientos bruscos o por la primera penetración vaginal.
Vulva:
Labios mayores o externos: parten del monte de Venus.
Labios menores o internos: confluyen en la parte anterior en el órgano eréctil femenino o clítoris. Debajo del clítoris, la uretra se abre al exterior, en el meato urinario.
Glándulas de Bartolino: situadas a los lados de la mitad posterior del orificio vaginal. Producen una secreción lubricante que facilita el coito.
Mamas: Formadas por tejido glandular, grasa y abundante tejido conjuntivo. Cada una tiene de 15 a 20 lóbulos. Cada lóbulo está constituido por un conjunto de células secretoras que se unen y excretan en varios conductos galactóforos, que confluyen en el pezón. La areola es la zona de la piel más pigmentada que rodea el pezón. Contiene numerosas glándulas sebáceas.
2.2 Fisiología.
Ciclo sexual femenino: Tiene lugar en torno a la ovulación, con el fin de crear las condiciones óptimas para la fecundación del óvulo y su posterior implantación en el endometrio. Se extiende desde la pubertad hasta el climaterio y comprende el ciclo ovárico y el ciclo uterino.
La hipófisis segrega FSH y LH. Estas hormonas secretadas en sangre, a su vez, estimulan el ovario, que produce estrógenos y progesterona. Cuando estos últimos alcanzan unos niveles determinados, frenan la producción del hipotálamo y la hipófisis.
Cada ciclo dura aproximadamente 28 días.
Fases:
Fase folicular: desde el inicio de la menstruación hasta la ovulación.
Fase luteínica: desde la ovulación hasta la menstruación siguiente.
Ovulación: Consiste en la liberación del óvulo por el ovario al romperse un folículo de Graaf después de su maduración.
Pubertad: Primera menstruación o menarquía, que aparece entre los 11 y los 15 años y que se acompaña con la presencia de ciclos ováricos, el desarrollo de los órganos sexuales secundarios y la distribución de la grasa y el vello.
Climaterio: Suele producirse entre los 45 y los 50 años y marca el fin de la fertilidad de la mujer.
Menopausia: última regla que se confirma con un año de amenorrea.
Ciclo ovárico:
Ciclo uterino:
2.3 Patologías.
Infecciones: vulvitis, vaginitis o colpitis, bartolinitis, cervicitis y salpingitis.
Tumores: cuello del útero, cuerpo del útero, ovarios poliquísticos, mastopatía fibroquística.
Gestación: prolapso uterino, embarazo ectópico, amenaza de aborto.
Esterilidad.
3. EL EMBARAZO.
1. Fecundación.
Tiene lugar en el tercio externo de la trompa de Falopio. Uno de los muchos espermatozoides que circunden al óvulo atraviesa su zona pelúcida y la hace impermeable a otros espermatozoides.
2. Gestación.
Comprende el tiempo que transcurre desde la fecundación hasta el parto. Dura alrededor de 37 a 42 semanas.
El desarrollo embrionario y fetal: En forma de blastocito cuando llega al útero, se produce su anidación o implantación en el endometrio.
El embrión: Producto de la concepción desde la segunda semana después de la fecundación hasta la novena semana.
El feto: Inmaduro (de 500 a 1000 gr, 21 a 27 semanas), Prematuro (de 1000 a 2500 gr, 28 a 37 semanas) o Maduro (de 2500 gr en adelante, 37 a 42 semanas).
La placenta: dos funciones: Glándula endocrina e intercambios metabólicos feto-madre.
3. Parto.
Terminación fisiológica del embarazo que da lugar a la expulsión de un feto maduro por vías naturales.
A término: 37 a 42 semanas.
Pretérmino: antes de 37 semanas.
Postérmino: después de 42 semanas.
Fases:
Dilatación: El cuello del útero se dilata hasta 10 cm y comienzan las contracciones uterinas.
Periodo expulsivo: La presión intraabdominal impulsa al feto.
Alumbramiento: Se expulsan la placenta y los anexos fetales.
4. Puerperio.
Periodo que transcurre desde la terminación del parto hasta la completa normalización del organismo femenino. No se consigue antes de 6 u 8 semanas.